El secador desecante para plástico es un equipo utilizado en la industria de transformación de plásticos para eliminar la humedad interna de los materiales higroscópicos, es decir, aquellos que absorben agua a nivel molecular desde el ambiente. Este tipo de secador es esencial para garantizar la calidad del proceso y del producto final en materiales técnicos como el PET, PA (poliamida), PC (policarbonato), ABS, entre otros.
A diferencia del secador por aire caliente, que únicamente elimina la humedad superficial, el secador desecante para plástico trabaja con aire seco a un punto de rocío controlado, generalmente por debajo de -40 °C. Este aire deshumidificado circula a través del lecho de material en la tolva, extrayendo progresivamente la humedad contenida en el interior de los gránulos plásticos. Posteriormente, el aire cargado de humedad se regenera en un ciclo cerrado, asegurando una eficiencia energética óptima.
El principio de funcionamiento se basa en la utilización de un lecho desecante (habitualmente compuesto por gel de sílice, tamiz molecular o combinaciones de ambos), que captura la humedad del aire de proceso. Los sistemas de secado con punto de rocío controlado permiten alcanzar niveles muy bajos de humedad residual, imprescindibles en aplicaciones de alta exigencia como la fabricación de piezas ópticas, componentes médicos, elementos electrónicos o productos para contacto alimentario.
Uno de los aspectos más importantes en el uso de un secador desecante para plástico es la correcta programación de los parámetros de proceso: temperatura de secado, tiempo de residencia, caudal de aire y punto de rocío. Un secado insuficiente puede provocar defectos como burbujas internas, fragilidad, degradación térmica, problemas de acabado superficial o variaciones dimensionales. Por el contrario, un secado excesivo o mal regulado puede deteriorar el polímero, reducir su estabilidad térmica o generar amarilleamiento.
La mayoría de los sistemas modernos de secado desecante están automatizados e integran controles electrónicos que ajustan los parámetros según el tipo de material y las condiciones ambientales. Algunos equipos permiten operar con doble torre desecante, lo que garantiza un flujo continuo de aire seco, incluso durante el ciclo de regeneración del desecante. Esto mejora la eficiencia global del sistema y asegura un proceso estable y constante.
En el contexto industrial, el uso del secador desecante para plástico es especialmente relevante en líneas de producción de alta precisión, donde los niveles de humedad influyen directamente en la calidad del producto final y en la repetibilidad del proceso. También resulta fundamental en operaciones de moldeo por inyección de piezas complejas o en la extrusión de láminas, fibras o tubos donde la presencia de humedad puede afectar la estabilidad dimensional y la resistencia mecánica del producto.
En empresas como Plásticos Lezo, donde se manipulan polímeros técnicos para aplicaciones exigentes, la eliminación de humedad en polímeros higroscópicos mediante sistemas desecantes forma parte de las buenas prácticas de fabricación. La correcta preparación del material antes del moldeo no solo garantiza la calidad estructural y estética de las piezas, sino que también contribuye a la eficiencia energética y al control del rechazo de producción.
En resumen, el secador desecante para plástico es una herramienta clave para la eliminación de humedad en polímeros higroscópicos, imprescindible en la transformación de materiales técnicos. Gracias a los sistemas de secado con punto de rocío controlado, es posible asegurar procesos estables, productos de alta calidad y una mayor eficiencia en la industria del plástico técnico.