La extrusora de doble tornillo para plástico es una máquina avanzada utilizada en la transformación de materiales plásticos, especialmente cuando se requiere una mezcla más homogénea, mayor flexibilidad en la formulación o el procesamiento de compuestos complejos. A diferencia de las extrusoras de tornillo simple, este tipo de extrusora utiliza dos husillos paralelos que giran en el mismo o en sentido opuesto, permitiendo un mayor control sobre el proceso y una capacidad superior de dispersión y distribución del material.
Esta tecnología se emplea principalmente en la producción de compuestos plásticos, mezclas maestras (masterbatches), aditivación de polímeros, reciclaje avanzado, bioplásticos y en la extrusión reactiva. La extrusora de doble tornillo para plástico es capaz de manejar cargas minerales, fibras, aditivos líquidos o sólidos, pigmentos, y hasta materiales sensibles al calor, gracias a su capacidad para modular el tiempo de residencia y la temperatura en cada zona del cilindro.
Uno de los elementos clave de esta extrusora es la configuración de los tornillos, que pueden ser co-rotativos (ambos giran en la misma dirección) o contra-rotativos (giran en sentidos opuestos). Los modelos co-rotativos son los más comunes en aplicaciones técnicas debido a su alto rendimiento de mezcla, su flujo autolimpiante y su excelente control del cizallamiento. Además, la posibilidad de modificar el diseño de los elementos del tornillo permite adaptar la máquina a distintas formulaciones y requerimientos del proceso.
La extrusora de doble tornillo para plástico se compone de varias zonas de procesamiento: alimentación, fusión, mezcla, desgasificación y bombeo. En cada etapa, los husillos generan un tipo de acción mecánica específica que puede ser de transporte, compresión o cizallamiento. Esta flexibilidad permite trabajar con formulaciones complejas donde se requiere una dispersión uniforme de los aditivos o la incorporación de cargas en porcentajes elevados.
Otra ventaja significativa es la posibilidad de realizar desgasificación atmosférica o al vacío, lo que resulta crucial al trabajar con materiales higroscópicos o reciclados que contienen humedad o componentes volátiles. Esto mejora la calidad final del producto extruido, evitando burbujas, porosidades o defectos superficiales.
En comparación con la extrusión de tornillo simple, las extrusoras de doble tornillo para plástico permiten un mayor grado de automatización y control del proceso. Están equipadas con sistemas de control de temperatura por zonas, sensores de presión, dispositivos de dosificación gravimétrica y software que permite registrar todos los parámetros críticos del ciclo. Esto no solo mejora la trazabilidad, sino que también permite mantener una calidad constante incluso en producciones complejas o con formulaciones variables.
En Plásticos Lezo, aunque nuestra actividad principal se centra en el moldeo por inyección, conocemos bien las aplicaciones de la extrusora de doble tornillo para plástico y colaboramos con socios tecnológicos que utilizan esta tecnología para fabricar compuestos técnicos de alto rendimiento. Estas formulaciones optimizadas luego se transforman mediante inyección para obtener piezas de altas prestaciones mecánicas, térmicas o químicas.
Además, asesoramos a nuestros clientes en el desarrollo de soluciones integradas donde la extrusión de doble tornillo es la etapa previa a la transformación final, ya sea en forma de granzas, filamentos, láminas u otros formatos personalizados.
En resumen, la extrusora de doble tornillo para plástico representa una solución técnica avanzada para procesos exigentes. Su capacidad de mezcla, control de parámetros y versatilidad en la formulación la convierten en una herramienta clave en la innovación de materiales plásticos. En Plásticos Lezo, valoramos esta tecnología como un eslabón estratégico en la cadena de valor de nuestros productos.