Los elastómeros termoplásticos (TPE) son una familia de materiales plásticos que combinan las propiedades elásticas del caucho con la capacidad de procesamiento de los termoplásticos. Esta combinación única los convierte en una opción ideal para aplicaciones que requieren flexibilidad, resistencia al impacto y facilidad de fabricación mediante procesos como el moldeo por inyección.
A diferencia de los elastómeros tradicionales (como los cauchos termoestables), los elastómeros termoplásticos (TPE) pueden fundirse y reformarse repetidamente mediante el calor. Esta característica permite procesos de producción más eficientes, reciclabilidad y una mayor versatilidad en el diseño de productos. Además, su comportamiento elástico similar al del caucho los hace adecuados para una gran variedad de aplicaciones técnicas e industriales.
Existen diferentes tipos de TPE, cada uno con características específicas adaptadas a distintos usos. Entre los más comunes se encuentran:
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TPE-S (Estirénicos): ampliamente utilizados en productos de consumo, herramientas y componentes de automoción. Son fáciles de procesar y ofrecen un buen equilibrio entre coste y prestaciones.
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TPE-O (Olefínicos): muy utilizados en la industria del automóvil y embalaje flexible. Presentan buena resistencia química y al envejecimiento térmico.
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TPE-U (Poliuretanos termoplásticos): ofrecen una excelente resistencia al desgaste, a la abrasión y a los aceites. Son ideales para aplicaciones exigentes, como mangueras técnicas, juntas o piezas de calzado.
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TPE-E (Poliésteres termoplásticos): se utilizan en componentes que requieren alta rigidez y resistencia a temperaturas elevadas.
Los elastómeros termoplásticos (TPE) destacan también por su capacidad de adherirse a otros materiales, lo que los hace muy útiles en procesos de sobremoldeado. Esta propiedad permite fabricar piezas bicolor o con zonas blandas y duras integradas en un solo componente, como empuñaduras, sellos o juntas. Además, algunos TPE son aptos para el contacto con alimentos o con la piel, lo que amplía su uso a sectores como el médico, el deportivo o el de envases alimentarios.
En el contexto del moldeo por inyección, los TPE presentan varias ventajas técnicas. Se procesan a temperaturas relativamente bajas, lo que reduce el consumo energético y el desgaste del molde. Tienen tiempos de ciclo cortos, buena fluidez y no requieren vulcanización, lo que agiliza la producción y facilita el reciclaje de los residuos generados. También permiten diseños complejos gracias a su flexibilidad y comportamiento elástico.
En Plásticos Lezo, trabajamos con diferentes tipos de elastómeros termoplásticos (TPE) según las necesidades específicas de cada cliente. Evaluamos cuidadosamente los requisitos de cada aplicación —como resistencia química, temperatura de uso, flexibilidad, acabado superficial o compatibilidad con otros materiales— para seleccionar el TPE más adecuado. Además, optimizamos los parámetros del proceso de inyección para garantizar un resultado preciso, duradero y de alta calidad.
Gracias a su combinación de elasticidad, reciclabilidad y facilidad de procesamiento, los TPE son cada vez más utilizados como alternativa a materiales tradicionales menos sostenibles. En sectores donde se busca reducir peso, eliminar componentes metálicos o crear piezas multifuncionales, los elastómeros termoplásticos (TPE) ofrecen una solución innovadora y eficiente.
En definitiva, los TPE representan una evolución dentro del mundo de los materiales plásticos: versátiles, resistentes y adaptables, permiten fabricar productos más ligeros, cómodos y sostenibles. En Plásticos Lezo, apostamos por este tipo de materiales para ofrecer soluciones técnicas avanzadas que se ajustan a los desafíos actuales de diseño y producción.